El organismo humano es muy parecido al de una planta, extrae la energía necesaria para alimentar los estados emocionales y esta esencia puede energizar células y causar incrementos en el cortisol y catabolizar células en función de la detonación emocional. Esta es la razón por la que hay ciertas personas que se sienten incómodas en grupos específicos en los que hay una mezcla de energía y emociones.
También esta es la inexplicable razón por la cual los humanos podemos absorber la energía y sanarnos a través de otros seres humanos, animales, plantas o espacios en donde priva el reino mineral, como las aguas mineralizadas o las arenas del mar. Por eso nos sentimos atraídos hacia las playas, hacia el campo o hacia las montañas, porque nos resulta estimulante y energizante.
Se dice también que, las personas ancianas, faltas de salud o de energía, inconscientemente buscan la compañía de niños y jóvenes o personas sanas para obtener la vitalidad que no tienen.
Si usted desea limpiar su espacio y evitar que otras personas le extraigan su energía, tenga cuidado de:
Mantenerse centrado y conectado a tierra, es decir centrado en su ser espiritual sin estar juzgando y analizando todo lo que sucede a su alrededor, podrá notar cuando algo se mueve dentro de su espacio o campo energético. De esta manera, usted podrá rechazar la energía y emociones negativas de otras personas y enviarla hacia abajo, hacia la tierra.
En presencia de personas negativas manténgase en un estado de no-resistencia. Si siente incomodidad en torno a determinada persona o personas, no oponga resistencia como forma de protegerse, pues si les pone atención o comienza a juzgarles, la energía extraña se queda dentro de su espacio. Piense en otra cosa o ponga atención en la forma en qué están vestidas o cualquier otro detalle que evite le contagien sus emociones.
Otra forma de rechazar las energías negativas, es imaginar que su cuerpo es claro y transparente como de cristal o de agua y que si alguien le arroja palabras, miradas o emociones hirientes, tan sólo traspasarán su cuerpo sin que se queden dentro.
Su aura es sólo suya, el aura energética que rodea su cuerpo es impenetrable para los demás. Tome conciencia de los límites de su aura, que es más o menos la distancia que abarca su brazo extendido, alrededor de todo su cuerpo, hacia arriba y hacia abajo.
Para limpiar su aura de energías negativas, imagine su aura de color dorado ya que este color tiene una alta vibración y es capaz de despejar la energía exterior. Otra forma, es imaginar que por encima de su cabeza hay una ducha por la que fluye una energía dorada cuyos rayos y chispas corren a través de su cuerpo y aura mientras limpian todas impurezas que pueden haberse adherido. Pronto se sentirá ligero, limpio y fresco.
Invoque su propia energía. Cierre su campo energético en presencia de otras personas. Repita mentalmente, que nadie puede robarle su energía por más que lo intente e imagine que usted es un imán que atrae su energía y no permite que se le escape.
Aprenda a distinguir a las personas que extraen energía de otras personas todo el tiempo. Las identificará como quienes siempre están externando sus quejas. Son personas que se quejan de todo, del clima, de la falta de dinero, de las enfermedades, de sus familiares, etc.
Otros vampiros de energía son quienes asumen que deben regañar o llamarle la atención a todos los que les rodean, y nunca están satisfechos con los resultados de nada y desaprueban las acciones de los demás.
De las personas que acostumbran criticar, amenazar, culpar o sobornar a quienes tienen cerca y cuya vida es un mundo de quejas, amenazas y castigos, manténgase lo más lejos posible. Si tiene dentro de su círculo cercano personas así, evite entrar en contacto frecuente con ellas, ya que le robarán su energía.
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